Por: Marcos Dominici B.
(Especial por 9 de junio, Día Mundial de la Acreditación).-
Los gastos excesivos de recursos económicos en los que incurren los gobiernos de manera consuetudinaria, han sido parte de la debacle económica en la que estos han sumido a la sociedad dominicana, ya sea por la falta de planificación, la dualidad de funciones de muchas instituciones o el clientelismo político, que en ninguno de los casos resulta provechoso para el país.
Con su llegada al Poder, el presidente Luis Abinader dispuso la eliminación de algunas instituciones que no cumplen ninguna función y que -a juicio del mandatario dominicano- resultaban ser una carga económica para el Estado, además de fusionar otras que él ha entendido, cumplen una dualidad de funciones.
La senadora Faride Raful (PRM), sometió un proyecto de ley que busca la eliminación de 58 instituciones del Estado con el propósito de ahorrarle millones de pesos al erario público.
Aunque otros gobiernos ya habían optado por cerrar o eliminar instituciones alegando razones similares, sería quizás la primera vez que un Presidente inclina su mirada hacia esta problemática, con signos de preocupación.
Se plantea entonces la necesidad de evaluar con ojo crítico a una entidad que aunque realiza una actividad importante, como la acreditación, muchos sostienen que sus gastos resultan ser excesivos en relación con el servicio que ofrece.
Un análisis coherente, objetivo y reflexivo, podría abrir un debate sobre hasta qué punto sería viablemente sustentable para el Estado dominicano seguir financiando y manteniendo la estructura de gastos que desembolsa anualmente el Organismo Dominicano de Acreditación (Odac), para desarrollar sus actividades.
Para la República Dominicana, la acreditación, aunque es un proceso voluntario, tiene un gran significado en el ámbito del comercio internacional, porque derriba barreras técnicas al comercio y permite la entrada de productos, procesos y servicios de origen dominicano a los mercados internacionales.
Sin embargo, en estos tiempos de crisis global, donde el país hace esfuerzos sobrenaturales para recuperar la economía dominicana tras el daño ocasionado por la pandemia del Coronavirus (Covid-19), hay quienes creen que los gastos excesivos para el sostenimiento de esa institución, no se compadecen con la realidad que actualmente vive la nación dominicana, y sus recursos pudieran ser utilizados para estimular la economía.
El Odac, ofrece el servicio de Acreditación de Evaluación de la Conformidad, dirigido a los organismos que evalúan la conformidad (OEC), en empresas e instituciones, sin embargo se observa que ese servicio no ha sobrepasado en ningún caso, de cinco acreditaciones al año, pero los gastos para operar esa oficina estatal superan por lo menos en este año 2021, los RD$ 85 millones de pesos.
Suponiendo que una acreditación tenga un costo general de Cien mil pesos, los responsables de ejecutar el plan de reestructuración de las instituciones del Estado, tienen la enorme oportunidad de explicarle al Presidente Abinader, ¿cuán rentable puede ser una institución que para recibir entradas por concepto de servicio, de cinco acreditaciones al año, tal vez equivalentes a Quinientos mil pesos aproximadamente, tenga que gastar para operar más de RD$ 85 millones de pesos?
Sería interesante conocer, por ejemplo, ¿Cuánto invierte el Odac por concepto de pago de arrendamiento o alquiler del local donde funciona su oficina?
¿Está el Gobierno de la República Dominicana en posición de mirar lo que allí ocurre y simplemente obviarlo?
Ante esta realidad, hay quienes creen que para ahorrar costos, el Odac pudiera ser fusionado con el Instituto Dominicano para la Calidad (Indocal), ya que los servicios que ofrecen; Evaluación de la Conformidad y acreditación (Odac), y Normalización y Metrología (Indocal), van dirigidos al sector industrial, por lo que entienden que es un gasto doble e innecesario mantener la estructura del Odac bajo las condiciones en las que se encuentra en la actualidad.
Otros sostienen que el Odac podría cohabitar junto a otras instituciones que realizan servicios similares vinculados a los procesos de la calidad dirigidos a laboratorios, como el Instituto de Innovación en Biotecnología e Industria (IIBI) o el Laboratorio Nacional “Dr. Defilló”, instituciones del Estado que poseen grandes edificaciones y extensiones territoriales que podrían acoger al personal del área sustantiva, que son los evaluadores.
Para ponerlo en contexto, la realidad de otros países mucho más adelantados que nosotros en materia de acreditación, sugieren que los entes de acreditación son pequeñas unidades o cuerpos que no ameritan más de cinco a ocho personas para funcionar.
Precisamente por esa razón su nombre describe en muchos casos la esencia de la entidad, como oficinas, entes, cuerpos u organismo.
Por ejemplo, en Nicaragua funciona la Oficina Nacional de Acreditación (ONA); En Costa Rica, el Ente Costarricense de Acreditación (ECA); En Guatemala, la Oficina Guatemalteca de Acreditación (OGA); en Honduras, la Oficina Hondureña de Acreditación (OHA), entre otros organismos.
De ahí se desprende, que el modelo estructural de gran parte de las entidades de acreditación que coexisten en las Américas, en su mayoría opera con cinco, siete y hasta ocho personas en total, ofreciendo a su país los servicios de acreditación y de evaluación de la conformidad de manera eficiente y oportuna.
En el caso dominicano, si se consulta la página web del Odac, se puede verificar que este organismo mantiene en sus tres nominas un total de 58 colaboradores, incluyendo a su Director, de los cuales 23 son técnicos que forman parte del área sustantiva, integrada por:
- 4 Evaluadores.
- 8 Evaluadores en Formación.
- 2 Líderes de Equipo bajo Supervisión.
- 9 Líderes de Equipo, para un total de 23 técnicos en acreditación. Los restantes 34 colaboradores son personal administrativo, de apoyo y vigilancia.
El Organismo Dominicano de Acreditación (Odac), fue creado mediante la Ley número 166-12, que crea el Sistema Dominicano para la Calidad (Sidocal), iniciando operaciones a partir del año 2013, con la designación de un primer director ejecutivo.
Sus funciones son básicamente respaldar la competencia técnica de los organismos evaluadores de la conformidad (OEC) y otorgarles la acreditación según las normas internacionales.
Para lograr su objetivo, ese organismo realiza evaluaciones técnicas a los OECs que solicitan sus servicios y tras verificar que estos cumplen con las normas internacionales que les apliquen en cada caso, el Odac procede a otorgarles la acreditación, bajo algunos de los esquemas o alcances siguientes:
- Acreditación de Organismos de Certificación de Personas Bajo la Norma NORDOM ISO/IEC 17024: 2012.
- Acreditación de Organismos de Certificación bajo la norma NORDOM-ISO/IEC 17021-1 y NORDOM-ISO/IEC 17021-2.
- Acreditación de Organismos de Inspección bajo la Norma NORDOM ISO/IEC 17020:2012; Acreditación de Laboratorios de Ensayo y Calibración bajo la norma NORDOM ISO/IEC 17025:2017 y Acreditación de Organismo de Certificación bajo la norma NORDOM-ISO/IEC 17065: 2012.
¿Pero cuántos recursos gasta el Odac cada año para mantener sus servicios?
Según el Portal de Transparencia del Organismo Dominicano de Acreditación, que es un documento de acceso al público, para este año 2021, en el Presupuesto de Gastos y Aplicaciones Financieras, aprobado por la institución, se detalla que gasta RD$ 50, 061,184.00 pesos en Remuneraciones y Contribuciones, de los cuales RD$ 38, 653, 623.00 pesos se van en Remuneraciones.
En Sobresueldos, el Odac gasta RD$ 6, 325,049.00 pesos; En Dietas y Gastos de Representación, el Odac absorbe RD$ 441,000.00 pesos. En Contribución a la Seguridad Social, paga RD$ 4,641, 512.00 pesos.
En Contratación de Servicios, el Odac gasta RD$ 29, 732,426.00 pesos, de los cuales, en Servicios Básicos gasta RD$ 3, 353.000.00 pesos; En Publicidad, Impresión y Encuadernación RD$ 1, 040,730.00; En Viáticos, RD$ 433, 000.00 pesos; En Transporte y Almacenaje, RD$ 1, 080,000.00 pesos; En Alquileres y Rentas, se pagan RD$ 11, 850,000.00 pesos y en Seguros, RD$ 2, 900,000.00 pesos.
En Servicios de Conservación, Reparaciones Menores e Instalaciones Temporales, el Odac consume este año RD$ 565,000.00 pesos; En Otros Servicios No incluidos en Conceptos Anteriores, se gastan RD$ 5, 930,696.00 pesos, y en Otras Contrataciones de Servicios, gasta RD$ 2, 580,000.00 pesos.
Solo en Materiales y Suministros, el Odac consumirá este año 2021, RD$ 5, 428,800.00 pesos, de los cuales, RD$ 125,000.00 pesos se utilizan en Alimentos y Productos Agroforestales; RD$ 130,000.00 en Textiles y Vestuarios, y RD$ 288,000.00 pesos en Productos de Papel, Cartón e Impresos.
También, en Productos Farmacéuticos, el Odac paga RD$ 300, 000.00 pesos; En Productos de Cuero, Caucho y Plástico, se van RD$ 172,800.00 pesos; En Combustibles Lubricantes, Productos químicos y conexos, el Odac gasta RD$ 3,360.000.00 pesos y en Productos y Útiles Varios, Odac consume RD$ 1, 053,000.00 pesos, de acuerdo a lo publicado en su portal de Transparencia.
- En Transferencias Corrientes al Sector Externo, el Odac destina RD$ 385,000.00 pesos.
- En Bienes, Inmuebles e Intangibles, el Odac paga este año RD$ 520,000.00 pesos en Mobiliario y Equipos.
En definitiva, para este año 2021, los gastos del Odac de acuerdo al Presupuesto de Gastos y Aplicaciones Financieras según, se observa en los documentos de acceso público del portal de Transparencia, totalizan unos RD$ 86, 127,410.00 pesos.
Se destaca que se observa una reducción de RD$ 6, 988,574.08 pesos, con relación al Presupuesto de Gastos y Aplicaciones Financieras, del pasado año 2020, el cual totalizó unos RD$ 93, 115,984.08 pesos, aprobado por la gestión anterior.
El autor es redactor de temas sobre calidad.